En imaginación no hay quien les gane, por eso los niños son en potencia los mejores creadores de robots del mundo. Puede sonar exagerado, pero por mucho que creamos que la tecnología es lo primero cuando hablamos de crear ‘juguetes’, ellos se llevan la palma.
Eso sí, no son los típicos coches o máquinas con funciones limitadas que compras en una tienda y terminan abandonados. Aquí se trata de crear, de aplicar conocimientos y comprobar que todo funciona… Así difícilmente los más pequeños olvidarán nunca ni su juguete ni su proeza. Mucho menos si su regalo puede ser un robot parecido al Wall-e de la película.
En Proinnova somos conscientes de que desde edades muy tempranas la robótica para niños puede ayudarles a desarrollar su cerebro con un lenguaje sencillo de programación que puedan tomarse precisamente así, como un juego. Y por eso para nosotros es un lujo participar en los talleres de uno de los museos científicos más visitados por los menores de nuestro país. Volvemos al Parque de las Ciencias con nuestros populares talleres los fines de semana hasta el próximo 13 de diciembre. ¡Y allí os queremos ver!
En esta página puedes consultar todas las fechas y la forma de inscribir a niños a partir de 5 años.
Lego WeDo
Nosotros les damos las herramientas y ellos solos pueden construir modelos robóticos diferentes. Lego WeDo es la mejor forma de iniciar a los niños desde los 5 años en la construcción de un robot.
Asistiendo a estos talleres aprenden a crear máquinas y animales con sus propias acciones y comportamientos. Ni os imagináis lo que esto supone para ellos: ver cómo su cocodrilo consigue abrir la boca o su grúa funciona es una satisfacción grandísima para nosotros. Además de construir su propio juguete, la mejor aventura es que aprenden casi sin darse cuenta.
A través de unos sensores y un motor sencillísimos su gran ‘tarea’ consiste en montar el puzle que dará vida a sus robots. Lo hacen gracias a las ciencias, la física, las matemáticas o hasta la ingeniería, pero el secreto del éxito de estos talleres es que usarlas no supone para ellos apenas esfuerzo.
Por si fuera poco, los niños aprenden además a trabajar en equipo.
Mindstorms
No hay nada como animar a construir un ‘robot héroe’ para que rápidamente todos quieran participar. Es sólo una de las experiencias que ofrecen los talleres dedicados a Lego Mindstorms para grupos de edades a partir de los 8 años. Probablemente aquí estén los ingenieros del futuro porque una vez aprenden a manejarse con las herramientas de este mini curso y se sorprenden con todo lo que son capaces de hacer, comienza su afición por la robótica.
Puede que a ti no te suenen de nada, pero con esta sencilla tecnología pueden construir robots tan populares (pregúntale a tus hijos) como los Track3R, Spik3R o R3ptar. Este último, por ejemplo, se desliza por el suelo como una auténtica cobra y ataca como un relámpago con sus colmillos rojos.