Una de las mayores preocupaciones de cualquier padre y/o madre es orientar la educación de sus hijos y/o hijas para que sean personas de éxito en la vida. Elegir la guardería, el centro escolar o la universidad adecuadas se convierte en una decisión crucial que nos desvela en más de una ocasión.
Esta decisión se basa en multitud de criterios pero todos relacionados y enfocados al futuro. Nos preocupamos porque su formación sea lo más completa para que se desenvuelvan en un mundo cada vez más globalizado y competitivo. Por eso los idiomas se han consolidado como un elemento indispensable, y al habitual inglés, se suman otros idiomas: francés, alemán e incluso mandarín.
¿Qué otros conocimientos deben aprender los niños y niñas de hoy?
Para responder a esta pregunta quizás deberíamos intentar predecir el futuro: ¿cuales serán los trabajos más demandados y cuales los requisitos para ocuparlos?
Todos los años se publican estudios que responden estas dudas. Sin embargo, estamos inmersos en un proceso de cambio tan profundo que es realmente complicado vislumbrar con acierto que formación necesitará un niño o niña de 10 años, dentro de 12 o 13, cuando comience en el mercado laboral.
¿Idiomas?
Te recomiendo que veas el vídeo de Sigmo Voice o la app Word Lens e imagines el proceso de evolución que tiene la tecnología hoy en día.
Otro dato que puede hacernos entender estos cambios es que en el año 2017 diversas empresas lanzarán al mercado los coches autónomos, aunque aún está lejos de utilizarse en cualquier situación, es cuestión de tiempo que así sea. Por tanto, ¿necesitarán carnet de conducir? ¿tendrá sentido trabajar haciendo seguros de coches?
¿Aprender robótica?
Son numerosos los artículos de opinión y debates que hacen referencia a la amenaza que supone estos avances tecnológicos. Un ejemplo es la robótica, que sustituirá numerosos trabajadores en fábricas, pero también a profesionales como médicos. Considerando esta información, parece evidente que la respuesta a la pregunta inicial es SÍ.
Sin embargo, pensar así limita nuestra visión de futuro a las amenazas cuando también existirán oportunidades, puede que diseñador de experiencias de viaje sin conductor o nanomédica se conviertan en especialidades dentro de unos años.
Somos conscientes de esta gran incertidumbre y es por ello que enfocamos las actividades de robótica educativa, no a enseñarles la programación per sé, sino a utilizarla como herramienta para desarrollar habilidades y competencias fundamentales en su desarrollo y que siempre serán necesarias como es la creatividad, el enfoque a la resolución de problemas o la comunicación.